Ansiedad: ¿Qué es y cuáles son sus causas?
Muchas personas llegan a terapia diciendo “tengo ansiedad” o “sufro ataques de ansiedad”. Pero ¿Qué es realmente la ansiedad y cuáles son sus causas?

La ansiedad no es un problema en sí mismo, sino más bien una señal. Algo en la vida de la persona no está funcionando del todo bien. Puede ser una elección que no termina de cerrar, una situación que se vuelve insoportable, un deseo que no encuentra su cauce o una exigencia que no se puede sostener. La ansiedad aparece entonces como un efecto, una consecuencia de eso que no está siendo dicho o elaborado.
Cuando la ansiedad se acumula y se hace más intensa, puede explotar en lo que se conoce como un “ataque de ansiedad” o “ataque de pánico”. Aunque los nombres suenen distintos, en el fondo son lo mismo: una descarga abrupta de angustia que el cuerpo no puede contener. Aparecen palpitaciones, falta de aire, miedo a morir o a volverse loco. Todo esto sucede y es muy difícil de atravesar, pero también tiene un sentido. No es azaroso ni producto de una falla química. Es el modo en que el cuerpo y la mente avisan que algo necesita ser escuchado.
El dilema de los psicofármacos y el psicoanálisis como solución
Frente a esto, muchos recurren —y a veces no hay otra en ese momento— a psicofármacos: benzodiazepinas como el clonazepam o alprazolam; o antidepresivos como la sertralina, escitalopram o fluoxetina. Estos pueden calmar los síntomas, pero no resuelven el problema de fondo. Son como bajar el volumen de la alarma sin revisar qué la disparó.
Para ir más allá y no quedar atrapado en una dependencia con la medicación, es necesario empezar un proceso terapéutico. Pero no cualquier terapia: una que permita escuchar, preguntar, poner en palabras. Una terapia que no busque rápidamente callar el síntoma, sino comprender qué lo causa. En ese sentido, el enfoque psicoanalítico es una herramienta poderosa: no se conforma con aliviar, sino que intenta transformar.
La ansiedad tiene un mensaje. No es cómoda, pero es valiosa si sabemos escucharla, y solo así vamos a poder entenderla y lograr resolver el problema de raíz que la causa. Hacer un trabajo sobre uno mismo es la manera más genuina de empezar a vivir mejor, sin tener que tapar con fármacos lo que pide ser dicho.